A
través de los años siempre han existido muchas dudas sobre cuales
son los criterios utilizados por los “votantes”, en términos de
seleccionar al Jugador Más Valioso de la NBA (MVP).
Derrick Rose |
Pero,
pónganse a pensar… ¿en realidad existen esas dudas? ¿Acaso
no vemos el claro patrón que se da en términos de los ganadores?
Muy bien podríamos argumentar que el título de (MVP) debe
llevar un nuevo apellido: Jugador Más Valioso del
Mejor Equipo de La Liga.
Enfocándonos en la palabra “MEJOR”, no en el común y
corriente existente Jugador Más Valioso de la Liga, porque amigos y
amigas, me parece que son dos cosas sumamente distintas.
Para
efectos de record, siempre se gana el cariño de los votantes “la
mejor historia”, en vez del jugador más destacado individualmente.
Vean, el que para muchos analistas, es el controversial, caso
del MVP otorgado a Derrick Rose (25.4 PPG / 4.1 RPG / 7.7 APG / 43%
FG) y los sorprendentes Bulls de Chicago con record de 62-20 en el
año 2011, sobre un quizás mejor año estadístico de LeBron James
(26.1 PPG / 7.7 RPG / 6.8 APG / 50% FG), con un Miami Heat que jugó
para 58-24. Nadie esperaba que los Bulls de Chicago jugaran de
la manera que lo hicieron, saltando de ser un simple equipo de .500
(41-41), que apenas logró hacer los Playoffs en el 2009-2010 , a un
soberano en el Este y portador del mejor record de la
liga…ciertamente una gran historia.
Si
me preguntan a mi, Rose merecía el premio por más que ser una gran
historia (pero eso lo hablaremos más adelante en otro escrito).
Otro
ejemplo lo es el también cuestionado (MVP) a Karl Malone (27.4 PPG /
9.9 RPG / 4.5 APG) sobre Michael Jordan (29.6 PPG / 5.9 RPG / 4.3
APG) en la campaña de 1996-1997. Esa temporada los Bulls de
Chicago jugaron para el mejor record de la liga con 69-13, el Jazz de
Utah lo hizo para 64-18, ganando la Conferencia del Oeste y
consiguiendo su primera final en su historia. Jordan venía de
ganar el (MVP) en la temporada anterior (1995-1996) y además siempre
fue dado por sentado que año tras año pondría estos fenomenales
números, por lo que a nadie sorprendía y así que la prensa se
inclinó por la “mejor historia”…Karl Malone y sus
evolucionados Utah Jazz.
Todo
este drama sucede así porque el premio actual del (MVP) no es un
“Oscar al Mejor Actor” – donde siempre tendría opciones a
ganarlo el que mejor actuó en una película (temporada), que no
necesariamente fuese primera en taquilla. Para ganar un (MVP)
en la NBA, debes combinar una gran historia, con una gran hoja de
estadísticas y mínimo unas 50, 60 victorias como equipo.
Me
explico con datos para que puedan entender mejor. Para optar
con reales posibilidades al MVP de la NBA, tu equipo tiene que casi
siempre (95% de las veces) haber ganado su Conferencia y si no, en el
más raro de los casos solo su división.
Es
por eso que esta temporada veremos jugadores como: Kobe Bryant
(Lakers), James Harden (Rockets), entre otros, que a pesar de sus
fabulosas estadísticas y de ciertamente ser “Jugadores Más
Valiosos” de sus respectivos equipos, podrían no ganar el
codiciado galardón del (MVP). Esto porque, aunque son grandes
historias, no combinan el otro elemento que hace falta, hacer a sus
equipos parte de la “elite” ganadora.
Karl Malone |
Pocas
veces, un jugador de un equipo sin casi todas esas características
gana el MVP. El único en hacerlo en estos últimos 25 años
fue Michael Jordan en el 1988 con los Bulls de Chicago, equipo que no
ganó ni su conferencia ni su división pero jugó para 50-22.
Por
último, analicemos el porque Carmelo Anthony (Knicks) tiene serias
posibilidades de llevarse el MVP este año, aún cuando Kevin Durant
(Thunder) ponga mejores números que él.
Tal
como en el caso de Karl Malone y sus Jazz (1996) y de Derick Rose y
sus Bulls (2011), los New York Knicks han dado un giro de 180 grados
en comparación con su temporada pasada. En otras palabras, son
“la mejor historia” de este año y ya sabemos en que posición de
ventaja eso lo pone. Pensemos por un momento el hecho de que
los Knicks pudieran (si siguen como van) ganar su primer título de
división desde el año 1994. Además de pasar de apenas ser un
7mo puesto de Playoffs el año pasado a un posible 1ro o 2do.
¿Quieren
más drama?, pues aquí les va! El año pasado Carmelo Anthony
vio como su imagen sufrió un gran golpe con todas estas acusaciones
de que era solo un anotador egoísta, de que no defendía, de que no
hacía mejor a sus compañeros, que solo jugaba para números
individuales y no por el bien del equipo, entre otras.
¿Esta
temporada qué se ve? ¡Todo lo contrario! Un Carmelo Anthony
más maduro que se ha echado a la prensa y a la opinión pública en
el bolsillo, gracias a su desempeño en la cancha y a la gran
historia del hasta ahora éxito de sus Knicks.
Dicho
esto y conociendo que “Melo” seguirá en batalla por el título
de anotaciones, además de seguir mejorado grandemente sus % de tiro
de campo (FG), % de tiros de 3’s puntos y defensa, no me
sorprendería para nada que, aunque los Thunder de Durant terminen
con mejor record y Kevin con mejores estadísticas que “Melo”, se
repita el patrón de selección del (MVP), donde “la mejor
historia” se lleva el mismo a casa.
Resulta
que después de todo, escoger el premio de MVP de la NBA no parece
ser una tarea tan difícil como pensábamos. Pues, resulta que
a veces se lo gana el mejor jugador, con la mejor historia… en el
mejor de los equipos y no necesariamente el más talentoso y efectivo
a través de todo el año de competencia. Lo que demuestra que
es un premio de equipo y no como a veces se nos hace ver, o sea
individual.
0 comentarios:
Publicar un comentario